jueves, 19 de febrero de 2009

NOS SALE RENTABLE LA VIDA QUE LLEVAMOS?

Es evidente que empezamos a enfrentarnos a los límites ecológicos de la actividad económica.

Un sistema económico liberal, cuyo objetivo es la búsqueda del lucro a corto plazo por intereses particulares, no toma en cuenta los costos a largo plazo de la degradación del medioambiente.

Los modelos económicos actuales son igualmente inaptos para estimar a su justo valor la "producción" de la naturaleza, indispensable a nuestra sobrevivencia: producción de oxigeno, fijación del gas carbónico por los bosques y océanos, regulación de la temperatura, protección contra los rayos solares, reciclaje químico, repartición de las lluvias, producción de agua potable, producción de alimentos, etc.

Si nuestros modelos económicos integrarían el costo real de la destrucción de la naturaleza, de la contaminación, de modificaciones climáticas, esto cambiaria radicalmente nuestra estimación de lo que es "rentable" de lo que no lo es..